Esta memoria se construyó así:
Calidad de vida, en mi entendimiento, nace de un contexto muy extenso, pero en mi experiencia hay algunos elementos muy importantes que ayudan a sentirte bien, y que tienen que ver con el trabajo que realizamos en Grupo Baum. Por ejemplo, el usar nuestro cuerpo al hacer ejercicio o al movernos por la ciudad tiene un impacto muy grande en nuestra calidad de vida a corto y largo plazo. Esto a su vez, tiene una relación directa con los tipos de entornos en los que vivimos. En esta memoria quiero platicarles por que la calidad de los espacios que construimos son motivo de orgullo para mí, y de cómo estos ayudan a que tengamos una mejor calidad de vida.
Esencialmente, lo que hacemos en Grupo Baum es construir espacios que todas las personas puedan disfrutar. En los últimos años hemos construido espacios diseñados para que sea más fácil que las personas caminen y anden en bici. Entonces poco a poco estos lugares se han adoptado por todo tipo de personas que andan a pie, en bici, o hasta corriendo para hacer ejercicio.
Lo que atrae mucho mi atención de esto, es cómo las calles renovadas se han llenado de gente haciendo ejercicio. Me ha tocado ver un señor que siempre pasa caminando con sus pesas, una chava en plena cúspide del sol trotando, personas con patines y patinetas, y otros tipos de ejercicio, en estas calles que inspiran a estas personas a usar el espacio que hemos mejorado. A mi me gusta mucho hacer ejercicio y comer bien, y disfruto ir al gym para sentirme mejor. Por eso me da mucha satisfacción ver a tanta gente usando las calles para este fin.
Quizás estas personas no lo sepan, pero están paseando, trotando, y corriendo sobre banquetas y calles que hemos cuidadosamente construido para cumplir exactamente esta función: ser un espacio útil, seguro y cómodo para muchos tipos de usos. Ahora se disfrutan estos espacios, pero para llegar a este nivel de ejecución tuvimos que pasar por muchos trabajos, acuerdos, cambios, y dolores de cabeza. No fue una tarea fácil.
Recuerdo cuando arrancamos el proyecto de la calle Junco y las condiciones en las que se encontraba, y proyectar cómo quedaría después de nuestra intervención, que fue una remodelación muy grande. En este caso tuve la oportunidad de aportar bastante al proyecto, desde coordinar el levantamiento topográfico hasta los últimos detalles de diseño del pavimento de concreto en la calle.
Una cosa muy importante que hice fue participar en el diseño de los tubos de drenaje de la calle y asegurame de que se realizara lo necesario para la durabilidad del proyecto. La verdad es que me da orgullo cada vez que llueve y no se encharca el pavimento. Entonces ya se podrán imaginar cómo me sentí cuando pasó un huracán y no quedó ni un solo charco. ¿Cuántas calles pueden presumir eso?
En mi trabajo también me ha tocado quitar postes y cables excesivos que estorbaban la visión en este entorno urbano para poder mirar al cielo y verlo claro. Colocar luminarias que en la vida nocturna generan un espacio seguro e incluso más agradable.
A lo que voy con todo esto es que, veo que hay una conexión muy directa entre la calidad de los espacios en los que vivimos y la calidad de vida que estos espacios permiten. Veo como mi convicción personal con el ejercicio y el bienestar se traduce al trabajo que hago en los espacios que construimos, que permiten que muchas más personas puedan buscar este estilo de vida también.
